Nicolas Cage regresa en otra de sus películas de sufrimiento y redención. ¿Habrá acertado con esta? Vamos primero con la sinopsis:
Caballeros del siglo catorce transportan a una acusada de brujería a un monasterio, donde los monjes deducen que sus poderes podrían ser la fuente de la peste negra.
Corta la sinopsis ¿no? Bueno, es que también es corto lo que diré de esta cinta. Comenzare diciendo que Nicolas Cage debería dejar de hacerse el sufrido por todo. Lo vimos en The Sorcerer´s Apprentice y repite aquí. Tu pasado no te deja seguir con tu vida, LO ENTENDEMOS, no es necesario que lo muestres una y otra vez.
Pasando del señor Cage mencionare a Ron Perlman (en mi opinión lo mejor de esta película), Claire Fox, que de alguna manera me pareció…carismática y Robert Sheehan, al que aun no puedo ver y no esperar que haga algo digno de su personaje en la serie britanica Misfits, que acompañan a Cage en la cinta y le dan tonos variopintos pero no hacen mucho para elevar la opinión que puedas tener al finalizar.
La historia es algo sencillo con un giro al final que se supone debe dejarte boquiabierto, los efectos usados no fueron los mejores y eso es una falta grave considerando el final de la historia de la bruja. Honestamente no recomendaría que vieran esta película a menos que estén muy aburridos en casa o quieran salir de la duda de si les gustara o no la película. En caso de caer en los dos casos anteriores les digo: Véanla bajo su propio riesgo.
Esta película tiene 5.4/10 en la IMDb. Abajo, como siempre, el tráiler.
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